Le dice que iba a volar como los pájaros. Le preguntó si no quería ir a verlo volar.
Margarita le respondió que estaba muy ocupada.
El conejo se fue.

Margarita después de hablar con el conejo se olvidó que tenía que hacer.

¿Me ayudan a cantar está canción?

Teje arañita, teje arañita.
Hay que ayudar a Margarita.
Teje arañita, teje arañita.
Hay que terminar la casita.

Con la canción Margarita se acordó lo que estaba haciendo.
Continuó haciendo la telaraña.

Apareció el elefante y le dijo a Margarita que el conejo se iba a tirar desde un árbol, porque pensaba que podía volar.
El elefante le preguntó que si no lo quería acompañar a ver al conejo.
La araña le dijo que no podía porque tenía muchas cosas que hacer.
El elefante se va.

Margarita se disponía hacer sus deberes, pero se olvidó que tenía que hacer.

¿La ayudamos de nuevo a Margarita con la canción?

Teje arañita, teje arañita.
Hay que ayudar a Margarita.
Teje arañita, teje arañita.
Hay que terminar la casita.

Margarita se acordó de nuevo gracias a la canción y continuó con la telaraña.

Mientras estaba con eso, apareció el León.
Le dijo a margarita que si no quería ir con él a ver al conejo volador. El león se burlaba del conejo porque sabía que no podría volar.
Margarita le respondió que no podía, que tenía muchas cosas que hacer. Pero también le dijo al león que lo convenza al conejo que no se tire.
El león le dijo que iba a tratar y se fue.

Margarita de nuevo quiso retomar lo que estaba haciendo y… no se acordó que estaba haciendo.

¿Chicos la ayudamos una vez más a Margarita con la canción?

Teje arañita, teje arañita.
Hay que ayudar a Margarita.
Teje arañita, teje arañita.
Hay que terminar la casita.

Un vez más gracias a la canción Margarita se acordó y siguió con la telaraña.

Mientras estaba con la telaraña aparece la rana.
Que le dijo a Margarita que el conejo se tiró del árbol y… no voló.
Del golpe que se dio contra el suelo le quedó un chichon en la cabeza, lo llevaron al hospital.
Le preguntó si no quería ir con él a visitar al conejo.

Margarita le respondió que le gustaría, pero cada vez que quería terminar lo que estaba haciendo se olvidaba.

La rana le dio la solución: Que se ate una cinta roja en una de sus patitas. Que cuando se olvidara que estaba haciendo que mire la cinta roja. Le aseguraba que así se iba acordar lo que estaba haciendo.

La rana se fue al hospital y le dijo que la esperaría ahí a Margarita.
Margarita siguió el consejo de la rana y se puso una cinta roja en una de sus patitas.

En ese momento cuando vio la cinta recordó que tenía que terminar la telaraña.

¿Chicos le cantamos esta canción?

Teje arañita, teje arañita.
Ya se curó Margarita.
Teje arañita, teje arañita.
Ya terminó la casita.

La araña Margarita después de terminar se fue a ver a su amigo conejo al hospital.
-FIN-

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